Escribo con un nudo en la garganta por la tragedia ocurrida en el Cerro San Cristobal del distrito del Rimac, por la volcadura de un bus de la empresa GREEN BUS que puso una vez más en evidencia los niveles de miseria humana de un puñado de personas que lejos de auxiliar a los heridos entre los que se contaban muchos niños, se volcaron sobre ellos como aves de rapiña para quitarles sus pertenencias.

El asalto de personas en estado de indefensión o ya fallecidos, es de lejos la cara más infame que nos ha mostrado un sector de nuestra sociedad, la más jodida, la más repulsiva y que merece la más absoluta condena sin ningún atenuante de todos nosotros.

Pero no solo este hecho nauseabundo nos muestra cuán jodidos estamos como Estado, aquí hay una cadena de responsabilidades de Autoridades Municipales del Rimac y Lima, que pretenden sacar cuerpo, tanto en el otorgamiento de la autorización de circulación con fines turísticos (sin las más mínimas exigencias de medidas de seguridad, muros de contención en curvas y pendientes, mejoramiento de señalización, el uso en un solo sentido en la pista del Cerro San Cristobal, etc.); como en la fiscalización en el cumplimiento de estas exigencias, máxime si el reclutamiento de pasajeros se da en la misma Plaza Mayor de Lima y calles adyacentes a ésta. IMPOSIBLE no haber sido fiscalizado.

Otro aspecto condenable fue la actitud de las Clínicas Médicas Privadas que se resistieron a a recibir a los heridos para su atención, anteponiendo los intereses económicos antes que la salvación de vidas humanas, hecho que debe ser sancionado ejemplarmente por SUSALUD y el Ministerio Público, porque es DELITO el omitir asistencia a personas en estado de peligro o vulnerabilidad, máxime por un hecho fortuito como un accidente de tránsito.

Nuevamente el país está de luto, al cierre de esta Columna se cuentan 9 fallecidos y más de 40 heridos, entre peruanos y extranjeros y lo más doloroso, que hayan niños entre éstos.

Lo que sí hay que resaltar que las cuentas del Ministerio de Salud y ESSALUD en las redes sociales se mantuvieron activas con información oficial, lo que no ocurrió con el Ministerio Público, cuya cuenta hubiese sido necesaria actualizar para tranquilidad de los familiares y amigos de los accidentados.

Mención especial para nuestros héroes, los Bomberos, como siempre los primeros en llegar junto a la Policía Nacional a la zona del siniestro para atender a las victimas.

Llegó la hora de aplicar sanciones  sin importar de quiénes se trate. ¿Cuántos GREEN BUSES más habrán en el país circulando sin control?  Es urgente evitar más tragedias.